Dirigido por Sari Gilman, narra la historia de cinco personas mayores que viven en un típico resort americano de jubilación. Parejas mayores de 55 años, que en sus épocas mozas, se mudaron a Florida, buscando una mejor vida apacible; ahora se encuentran luchando con la pérdida y el deseo universal de conexión humana.
Una mirada agridulce a la vejez y la obsesión por mantenerse con la auto-confianza para seguir solos. Y expone el abandono o el exilio de los ancianos en muchas familias, sobretodo en la cultura estadounidense.